En su sentencia de 18 de septiembre de 2017, el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (Granada) declara procedente, por indisciplina y desobediencia, el despido de una trabajadora por el incumplimiento constante y reiterado de su obligación de activar el GPS de seguimiento y control de rutas e inicio y fin de jornada implantado por la empresa. ​​